Conociendo un mundo diferente

Me gustaba que me enseñara lo que le gustaba. Era como si yo también descubriera un nuevo mundo, antítesis del anterior y estúpido mundo en que yo había vivido, o que parecía que había vivido alguna vez. Ahora estaba muy lejos. Entre más, mejor.

Nessie estaba por acabarse su biberón. Me había mostrado todo lo que habíamos hecho juntos ese día. Me dí cuenta que tenía un poco más de cabello, y se había puesto incluso más bonita de ser posible.

-¿Vas a querer más? Lo que tú digas, Nessie. "Tus deseos son órdenes"

Rei divertida con su coemntario y le mostre una imagen mia jugando con el
Queria hacer algo mas que estar solo en sus brazos sin hacer nada y ya no queria que mis tias me estuvieran peinando o vistiedno, queria pasar mas tiempo con el, con mi Jacob

-Dime qué quiéres hacer y lo haremos, Nessie

Vi que tenía unas ansias enormes de conocer el mundo, de probarlo a grandes mordidas, como un adulto, como una persona madura.

-Aunque sea peligroso... bueno, que no sea TAN peligroso, porque aún estás muy pequeñita

Lo mire con curiosidad y repeti la palabra peligroso en su mente, recordando las muchas veces que la habia escuchado, desde antes de nacer habia escuchado que yo era "peligroso" lo mire con duda
Que era "peligroso"?

Peligroso... peligroso como cuando te sientes a punto de decir una palabra difícil a la razón de que sigas merodeando por ahí. A mi pequeña Nessie. Vi su preocupación. Ella "peligrosa" hacía apenas poco. Mi Nessie. Mi vida. Te sientes culpable, te carcome la mala conciencia de cuando no podías decir su nombre...

Acaricié su cara con gestos torpes.

-Peligroso es... que no es bueno, que hace que algo se ponga malo... pero tú no eres peligrosa, bebé

Acaricié sus ricitos.

Preocupada. Yo preocupado. Sientes cómo te duele hasta el fondo del alma que ella se sienta así. Su cara llena de sentimiento, de preocupación y una madurez inigualable.

-No, no eras peligrosa. Simplemente eras especial, y lo eres. Eres la más bonita. Bella, tu mamá, sabía que no eras peligrosa, pero aún así, ella no es tan fuerte como tú, y por ello ahora está durmiendo, pequeña

La miré a los ojos rogando porque me creyeran, por ser más histriónico que cualquier estrella de Hollywood, por quizá ganarme un Óscar para que ella creyera en mí.

Sentí un cosquilleo reconfortante desde el punto de su cabecita hasta todo mi cuerpo. Como si supiera que jamás volvería a ser un infeliz o un idiota con ideas raras de un suicidio, de tonterías que antes tenía. Hice un esbozo de arrullo que parecía a simple vista tan torpe como una Bella humana.

-Es seguro, pequeña. Mamá despertará... aunque no ahora, no en.... -¿en cuánto tiempo despertaría? -un poco de tiempo, necesita descansar, está muy, muy cansada.

Busqué la manera de encontrar su mirada.

-Hablo enserio... pero ahora por favor, Nessie, duérmete. Ha sido un día muy largo, y debes estar muy sana para cuando mamá despierte.

Un día muy largo... quizá el más largo de mi vida, quizá no. Quizá el más corto porque había desarrollado una necesidad hacia ella tan veloz como un haz de luz, como la evolución de las bacterias. Una necesidad hacia ella que rayaba en la obsesión por hacerla feliz, pero una obsesión "buena". Jamás sería una niña infeliz, jamás se sentiría mal, yo me encargaría de eso. Mi Nessie sería la más feliz, la más hermosa, la más linda... todo, todo en mi vida llevaba su nombre, como un tipo de tatuaje de compromiso, el cual asumiría más dispuesto que un Beta a su Alfa, que un estúpido soldado al imbécil de su capitán.

Sólo sabía que este día, 10 de septiembre, no sólo había nacido ella, sino también un chico que velaría por su felicidad por la eternidad... y lo que le siguiera. Estaba tan seguro de eso "tan seguro como que el infierno existe".

Hay momentos en tu vida en los cuales te arrepientes de no haber cuidado a un bebé. Aborreces actuar como un i"analfabestia" porque eres un completo ignorante en lo que a cuidados se refiere. ¿Por qué se cansaban los bebés? ¡¡!!

Sentí como un calor, que era vergüenza acompañada de un rubor intenso, se apoderaba de mí.

-No sé, Nessie... supongo que como eres tan pequeña y delicada puedes quizá cansarte más rápido... y también porque las reinas y las princesas descansan, Nessie... tú eres lo que le sigue... qué idiota la verdad... pero es la verdad.

-Una reina es alguien con poder, porque es grande... no de tamaño, sino por... -¿Cómo explicar aquéllo en lo que jamás habías creído? -no importa, pero es algo bueno, significa que eres muy, muy importante.

Nessie no sabía poir qué se sentía cansada, deseaba saber cómo quitarse el cansancio y yo haría lo que fuera para hacer lo que ella deseaba. Le daría una respuesta, alimentando mi estúpìdo morbo de niñera de ver a su criatura dormir en sus brazos... jamás lo había hecho y jamás me había imaginado a mí mismo en los brazos de mamá cuando yo había sido un bebé... incluso a veces me preguntaba si lo habría sido, y si habría sido tan diminuto como Nessie.

-Debes cerrar los ojos -cerré los míos -Así. -los volví a abrir -, debes de tenerlos sólo un rato cerrados, hasta que comiences a... dar un paseo o algo por el estilo. A eso se le llama soñar, Nessie. Hace tiempo que yo no soñaba, sólo dormía, que es cuando no "viajas"... lo único malo de soñar es que, cuando vuelves a abrir los ojos, te das cuenta que jamás viajaste realmente, pero juro que es muy... guay

Claro que lo era. Hacía tiempo, cuando yo soñaba con otras cuestiones que ahora no vienen al caso, me sentía muy bien. Justo hace pocos meses cuando comenzó todo esto de los pálidos, ahora mi familia, tuve pesadillas... que estaba completamente orgulloso de decir que ya no significaban nada para mí.

Ahora... ahora sólo podía ser feliz ¿Cuán feliz iba a ser en cuanto yo fuera el que durmiera, si me daban ganas de dormir? ¿Me despertaría de tan feliz? A lo mejor, quizá pensaría que esto era lo mejor que una persona podría obtener en su vida, que me despertaría como un estúpido paranoico a comprobar si todo había sido real y no seguía vagabundeando en los bosques del norte y sur de Canadá...

Pero de algo estaba muy seguro: soñaría con Nessie todos los días de una vida que esperaba, fuera tan eterna como si, de ser Nessie un sueño, esperaba que fuera.